Rafel Nadal, Joan Mir, Cintia Rodríguez, Elena Gómez, Xavi Torres, Melani Costa, Augusto Fernández, Gaby Ocete, Sete Benavides... Todos estos deportistas mallorquines, campeones a nivel nacional e internacional, tienen algo en común: durante uno o varios años se formaron en el Centre de Tecnificació de les Illes Balears. La fábrica del talento deportivo de las islas cumple un cuarto de siglo y ayer los 320 alumnos que forman a día de hoy el programa soplaron velas acompañados por las principales autoridades del Govern.

Cintia se hace un selfi junto a Armengol y sus compañeras. | GOIB

«Ahora hacía cálculos... Veinte años hace ya que entré en el programa», recuerda con nostalgia la jugadora del Azul Marino Mallorca Gaby Ocete. «Recuerdo que solo era una niña de 14 años y que me embarqué en esta oportunidad con muchísima ilusión. Fueron cuatro años de formación que marcaron mi trayectoria. Hice grandes amigas en aquella época. Estudiábamos en Son Pacs y era una locura el trajín que nos traíamos, un estrés que no sé si ahora sería capaz de soportar», subraya la base mallorquina sobre su etapa de formación.

Álex Sánchez Palomero llegó a Príncipes en 2007 y hasta 2012 se formó en dinámica de grupo. Hoy en día sigue acudiendo a las instalaciones, pero ya fuera del programa del CTEIB: «Fueron años muy bonitos, pero también muy duros. Poder convivir diariamente con gente que lucha por los mismos objetivos que tú te ayuda a llevar todo mucho mejor. Todos los trabajadores del centro eran partícipes y lo siguen siendo de mis éxitos y también de mis fracasos. Fui bastante buen alumno, pero recuerdo que en mi primer mes en el programa hubo algo que me dejó muy marcado y es que coincidió con la tormenta devastadora que sacudió Mallorca en octubre de 2007 y que reventó Son Moix y también tiró abajo la piscina de 25 metros de Príncipes».

Sin salir de la pileta, porque todavía a día de hoy se mantiene insaciable, el nadador Xavi Torres recuerda con cariño sus productivos años en el Centre de Tecnificació. «Si la memoria no me falla, el programa para natación paralímpica arrancó en 2008 y yo lo abandoné en 2013. Disfruté cada momento que me tocó vivir en estas instalaciones, pero siendo sincero, siempre recordaré con especial cariño cuando nos íbamos todos los chavales a comer a un restaurante cercano. Era un momento muy entrañable porque nos juntábamos todas las modalidades y siempre había muchísimas bromas», evoca el laureado deportista.

Armengol, Fina Santiado y Gonyalons conversan con algunos de los deportistas del programa. GOIB

Las gimnastas Elena Gómez y Cintia Rodríguez no coincidieron en el tiempo, pero sí convienen en la importancia que tuvo para ellas su etapa de formación. «En el año 97 o 98 existía el programa de seguimiento de gimnasia, pero lo que todavía no teníamos aquí en Príncipes era el gimnasio que hay en la actualidad, así que yo un año más tarde me fui al CAR de Madrid. Recuerdo que en aquella época todo eso fue un cambio bastante radical para mí. Pasé de vivir en Manacor, ir a mi colegio y entrenar solo unas horas a la semana en mi club, a ejercitarme ocho horas diarias y convivir con otras gimnastas. Recuerdo que en aquel momento el cambio fue difícil de asimilar, pero al final era algo que a mí me apetecía», señala Elena Gómez.

«Yo entré en el CTEIB muy joven, en 3º de la ESO», recuerda por su parte Cintia. «Desde entonces llevo 20 años unida a estas instalaciones, que son ya mi casa. Al final los monitores, el personal y el resto de compañeros y compañeras se convierten en tu familia, pero sí recuerdo que para mí esos tres primeros meses fueron de los más duros de mi vida. Fue un cambio radical: levantarte a las 6 de la mañana, coger el bus para venir aquí, estudiar, entrenar siete horas al día siendo tan joven fue difícil de asimilar. Pero eran los objetivos que yo me había marcado y no quise ponerme excusas», subraya la ya exgimnasta.

El dos veces medallista olímpico Marcus Cooper Walz nunca estuvo interno en el centro, pues pasó directamente de su club a la selección española: «Pero sí he estado en numerosas ocasiones realizando aquí entrenamientos y test físicos. Lo que es evidente es que los resultados de este programa se ven reflejados a nivel nacional. Balears es una de las comunidades mejor situadas a nivel deportivo de España y más si se tiene en cuenta la proporción de población que tenemos».