Tras derrotar al Aston Villa 3-2 en una agónica última jornada, los de Pep Guardiola se volvieron a coronar campeones de Inglaterra por cuarta vez en cinco temporadas. Fue una victoria muy sufrida, pero a la postre muy festejada por todo el equipo del Manchester City. El mallorquín Carlos Vicens, una vez finalizado el partido, saboreó su primera Premier sobre el césped del Etihad, recogiendo la medalla acreditativa con el resto del equipo y dando rienda suelta a la alegría en la vuelta de honor.

A partir de entonces fue una noche de celebraciones con una cena en el propio estadio con los familiares más próximos, para continuar la fiesta en el centro de Manchester en un lugar reservado para el equipo. 

Esta ha sido la primera Premier con Carlos Vicens en el banquillo. El técnico mallorquín, responsable de las acciones a balón parado del equipo, consigue además el mejor récord histórico del equipo y de la propia Premier League en esta área. Los datos son demoledores: el City ha sido el máximo goleador de la Premier League en jugadas a balón parado con 22 goles en faltas y saques de esquina (sin incluir los penaltis). Más importante aún es que sólo ha encajado un gol a balón parado, concretamente en la visita al Aston Villa.

Como resaltó la web del club, «esto se ha logrado en base a la calidad de figuras como Kevin De Bruyne y Riyad Mahrez, así como la determinación de Ruben Dias, Aymeric Laporte, Rodri y otros, también es un gran testimonio del trabajo del cuerpo técnico de Pep Guardiola y sobre todo de Carlos Vicens».

El de sa Colònia, que se incorporó al staff de Guardiola el pasado verano, también repite campeonato después de ganar el título nacional de la Premier League sub18 la temporada pasada cuando dirigía al equipo juvenil citizen.