El catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota) no dudó en la navegación, la que hizo que los españoles Carlos Sainz y Lucas Cruz (Audi) se perdieran y dijesen prácticamente adiós a sus opciones de victoria al colocarse a 2 horas, siete minutos y 7 segundos del liderato, y se impuso también en el segundo día de competición aventajando en la general de coches en 12 minutos y 44 segundos a su principal perseguidor, el francés Sebastien Loeb (Bahrain Raid Xtreme).

De los candidatos a la victoria, solo el galo, junto a su copiloto, el belga Fabian Lurquin, supieron responder al dominio del catarí en un primer día de competición real en el que el sexto punto de control, a los 280 kilómetros de los 334 cronometrados, causó estragos primero en motos y más tarde en coches. El checo Martin Prokop (Benzina Orlen) acabó tercero la etapa a 21 minutos y 21 segundos de Al-Attiyah.

Con estos tres pilotos ya en meta, Sainz y Cruz lideraron el grupo de favoritos que se perdieron al buscar el sexto punto de control. El GPS del Audi mostraba las continuas vueltas intentando encontrar la pista buena, con la dificultad añadida de que las fuertes lluvias que cayeron durante la noche en Ha’il borraron referencias que aparecían en los libros de ruta. 2 horas, 6 minutos y 23 segundos se dejaron respecto a Al-Attiyah al llegar a este punto.

Día negro para Audi y su innovador vehículo híbrido, que dice adiós todas las opciones de ganar y no por problemas de fiabilidad que se podrían presuponer a principios de la prueba; lo que de ahora hasta el 14 de enero que acabe la prueba les tocará testear.

El sueco Mattias Ekstrom también se perdió, aunque encontró antes la ruta y se dejó ‘solo’ 1 hora y 22 minutos.

Por su parte, el francés Stephane Peterhansel, vencedor del Dakar en 14 ocasiones -seis en moto y ocho en coches- rompió la suspensión trasera de su coche en el kilómetro 153 de la especial, cuando iba en segunda posición en la tabla de tiempos, y tuvo que esperar a ser asistido.

El primer español en la etapa de este domingo fue Nani Roma (Bahrain Raid Xtreme). El vencedor en motos en 2004 y en coches en 2014 también tuvo problemas de navegación y se dejó 1h17'45'' respecto a la cabeza. Tiempo que, sumado a los 49 segundos del primer día después de tener problemas con una puerta que se le abrió en mitad de la especial, dejan muy mermadas sus opciones de luchar por la victoria final.

Daniel Sanders manda en motos

En motos, el austriaco Daniel Sanders (Gas Gas) venció también en el segundo día de competición, esta vez con un tramo cronometrado (especial) más largo, de 334 kilómetros, en el que se puso a la cabeza de los tiempos desde el primer punto de control, no se perdió y aventaja en 3 minutos y 7 segundos al chileno Pablo Quintanilla (Honda) en la general de la categoría.

Una jornada en la que el resto de favoritos se dejaron más de 30 minutos, con el actual campeón, el argentino Kevin Benavides (KTM), finalizando a 34 de Sanders.

El día se decidió del kilómetro 200 al 280. Ya avisó la organización que la especial de este domingo no contaba con grandes dificultades técnicas, pero sí de navegación; y las motos fueron las primeras en sufrirlas.

Sanders cogió ventaja desde el principio y no la soltó. Eso sí, hasta el quinto punto de control no abrió brecha respecto a Quintanilla (47 segundos). Del kilómetro 200 al 240 ya se encontraron las primeras dificultades.

Solo en esos 40 kilómetros, Sanders perdió 30 segundos: el británico Sam Sunderland (Gas Gas) 48; Benavides 1:40 minutos y el español Joan Barreda (Honda) 2:10. Pero la verdadera criba llegó en los siguientes 40.

Solo Sanders y Quintanilla pudieron encontrar el punto de control que, desde hace cuatro ediciones, ya no vale con pasar a 800 metros y hay que hacerlo a 300 para poder seguir adelante sin una gran penalización de tiempo. Los favoritos, quitando al austríaco y al chileno, comenzaron a dar vueltas sin encontrarlo, sufriendo pérdidas de tiempo importantes en solo el segundo día de competición.

"Voy a defender la navegación", dijo David Castera, director del Dakar, en una charla con medios españoles, entre los que estuvo EFE, semanas antes de arrancar la competición. Y lo cumplió.

Sunderland perdió 11 minutos y 25 segundos en ese punto; Benavides, actual campeón de la categoría, se dejó 30 minutos; mientras que Barreda cayó hasta los 39:48 minutos respecto a Sanders y dejó a Lorenzo Santolino (Sherco Factory) como el mejor español de la especial finalizando en quinta posición a 10 minutos y 4 segundos; igualando su mejor resultado en un Dakar.

Primer fuego real y primera criba en la 44ª edición del Dakar que deja a Sanders más líder, a los mandos de la moto del equipo español Gas Gas, con la marca austríaca KTM detrás, y a Quintanilla como único perseguidor real, a 3 minutos y 7 segundos a la espera de que se encuentren más dificultades.

Las que se le tendrían que poner de cara a los dos últimos campeones de la categoría ya que Benavides se queda en 14ª posición a 36:22 minutos y el estadounidense Ricky Brabec en 35ª posición a una hora y 16 segundos de distancia.