El jugador de los Angeles Lakers, LeBron James, hizo que el personal de seguridad echara a un par de aficionados de los Indiana Pacers tras insultar a su hijo, Bronny James. Además, según varios aficionados sentados cerca de la pareja, la mujer le llegó a decir que ojalá se muriera su hijo en un accidente de coche.

En las imágenes del partido del miércoles se puede ver como LeBron se acerca a uno de los colegiados del encuentro, le coge por el brazo y después se dirige directamente a los dos aficionados de los Pacers. Finalmente el árbitro llamó al personal de seguridad y los echaron del recinto deportivo.

Esto sucedió después de que el alero de Ohio se perdiera un partido por la sanción que le aplicaron tras golpear al pívot de los Detroit Pistons, Isiah Stewart. Por esta agresión se perdió uno de los partidos más importantes de la temporada frente a los New York Knicks en el emblemático Madison Square Garden.

¿Qué ocurrió?

Los hechos sucedieron en la prórroga del partido. El jugador, tras avisar a los árbitros, se acercó a los aficionados sentados a pie de pista y les señaló de manera muy agresiva. Esto provocó los abucheos de los aficionados desplazados al Greinbridge Fieldhouse. Fue entonces cuando el colegiado llamó a la seguridad del recinto para que lo abandonaran.

Según algunos testigos, la mujer llegó a decirle al LeBron que "ojalá se muera tu hijo" y, cuando salió del pabellón, hizo un gesto de burla.

A pesar del altercado, los Lakers se impusieron a los Pacers con un LeBron estelar con 39 puntos 5 rebotes y 6 asistencias y con dos triples decisivos en los últimos minutos del encuentro.

No es la primera polémica

No es la primera ocasión en que LeBron se ve involucrado en incidentes relacionados con los aficionados de la NBA e incluso en algún caso se han producido fuera de las pistas. En julio, el alero de los Lakers irrumpió en el partido de su hijo para increpar al 'speaker' del partido, que aseguró que a Bronny le pitaban las faltas por ser quien era.