Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Nueva resolución

La Audiencia de Barcelona anula la sentencia por el acoso a Paula Bonet

El tribunal considera que el fallo judicial no está suficientemente motivado y debe redactarse una nueva resolución en la que se precise el trastorno psíquico que padece el acusado y por qué se le aplica la eximente

La artista y escritora Paula Bonet. FERNANDO BUSTAMANTE

La Audiencia de Barcelona ha anulado la sentencia dictada contra el acosador de la ilustradora y escritora Paula Bonet, Victor G. T., al que se le impuso como "medida de seguridad" un máximo tres años y tres meses internado en un psiquiátrico porque sufre un enfermedad mental, libertad vigilada con tratamiento externo y el pago de una indemnización de 3.940 euros por los daños morales causados y por asistencia psicológica. La jueza de lo penal que dictó la sentencia deberá repetirla y justificar la eximente de trastorno mental que se aplica al acusado y su declaración como inimputable.

El tribunal considera que el fallo judicial del Juzgado Penal número 10 de Barcelona dictado en julio del 2022 no está suficientemente motivado, aceptando el recurso presentado por la fiscalía. "La aplicación de una eximente completa de alteración psíquica requiere un grado de motivación elevado, porque se trata de una circunstancia de configuración compleja y, siempre, muy exigente para poder permitir el conocimiento de las razones que la justifican", recalcan los magistrados." En este caso, inciden, es preciso desarrollar la argumentación que haga entender que tipo de patología es el "trastorno delirante erotomaníaco" que sufre en acusado y que afectación tiene en su persona. A su parecer, "debe explicarse la relación de causalidad entre el trastorno" y el acoso al que el acusado sometió a Paula Bonet, "teniendo en cuenta los factores circunstanciales, como el temporal".

De esta manera, la Audiencia resuelve que la primera sentencia "presenta un déficit de motivación, sobre todo en cuanto a la falta de valoración de una parte esencial del material probatorio generado en el proceso judicial", que no es otro que un informe elaborado por una forense. "Es fácil concluir que la motivación de la sentencia presenta un déficit insubsanable, consistente en la ausencia o en la insuficiencia de valoración de una prueba de todo relevante" para "conocer las razones" recogidas en la sentencia a ahora anulada. La jueza deberá redactar una nueva resolución siguiendo estos los criterios.

Los delirios y la "realidad paralela"

La jueza de lo penal alegó en su día que Víctor G.T padece "un trastorno patológico, una enfermedad mental diagnosticada como delirio erotomaníaco que condiciona por completo su voluntad", como argumento el abogado de la defensa, Sergi Mercè. Se trata de un trastorno mental inusual basado en los delirios del paciente al creer que otra persona está enamorada de él. En el juicio, la fiscalía pidió tres años de cárcel, mientras que la acusación particular, que representa a la artista, reclamaba cuatro, 

El joven acosaba a Bonet porque "vivía una realidad paralela que invadía su pensamiento y su comportamiento hasta límites irracionales", según esta sentencia, lo que le hacía imposible "actuar de acuerdo con una comprensión normal". La enfermedad de Víctor G.T., agregaba la jueza, "no tiene cura y puede encontrarse controlada mediante el oportuno tratamiento y medicación". La fiscalía y la acusación particular de la ilustradora, que ejerce la letrada Carla Vall, habían pedido desestimar la tesis del trastorno psiquiátrico.

La sentencia del Juzgado Penal número 10 declaraba probado que en julio del 2019, Víctor G. T. "se intereso" por Paula Bonet, "pese a no haber mantenido ningún tipo de relación previa", y comenzó a "imponer su presencia y buscar su proximidad" acudiendo al local en el que desarrollaba su trabajo. A finales de ese mes, acudió al taller en el que la artista impartía un curso en Barcelona y se coló en él al ser confundido por un alumno. En el interior, el acusado se presentó y verbalizó "su interés por ella". Ante ello, la víctima actuó con cautela y le invitó a marcharse, pero de "forma súbita" el imputado la abrazó. Después, la artista le acompañó hasta la puerta.

No obstante, Víctor G. T. regresó al taller en diversas ocasiones, reiterando tanto ante ella como a sus alumnas y empleadas su interés en conocerla y hablar con ella, pese a las múltiples negativas de Bonet, que debutó en la novela en 2021 con 'La anguila', obra con abundante autobiografía en la que hay episodios de abusos y hasta una violación. En una ocasión, el acusado llegó a pegar los labios y manos al cristal, que golpeó con insistencia. Tras las restricciones por la pandemia del covid, dejó en la entrada del local un bloc de notas con poemas y una bolsa de quesitos, otra vez un sobre que llevaba escrito una "V" y la expresión "el violador" y en una tercera un ramo de flores seco. Además, le envió mensajes a través de Twitter en los que llegó a amenazarla con estrangularla y descuartizarla.

Compartir el artículo

stats