Momiji es la palabra que en japonés se utiliza para hablar del cambio de color de las hojas del arce en otoño, época en la que los artistas pollencins Nofre Fuster y Antònia Borràs, cada uno por su lado, visitaron el país nipón. Ahora, con esa palabra presentan en la galería Lluc Fluxà, en la palmesana plaza de la Cavalleria, pinturas y dibujos inspirados en ese momento del año.
Nofre Fuster explica que por diferentes caminos, y en diferentes momentos de su vida, acabó llegando a Japón. «Y fue en otoño, en noviembre, cuando sucedió el viaje, tan largo tiempo esperado, generándome un impacto total visual, estético, espiritual y humano», detalla el artista en un escrito de presentación de esta exposición. «Muchísimas cosas encontré, muchísimas para quedar impregnado, para asimilar e interiorizar... Para descubrir, para probar, ni que sea un poquito, de lo que tiene la cultura nipona y los japoneses», añade Fuster.
Momiji mostrará hasta finales de mes hasta dónde se dejó «llevar por el corazón» con la intención de plasmarlo en su arte «de alguna manera».
También era otoño cuando estuvo en el país asiático Antònia Borrás, artista y amiga de Nofre Fuster. «A partir de aquí, compartir el impacto estético, visual y espiritual por Japón, y tener el coraje de captar alguna chispa, y hacer arte: para contar nuestra experiencia por tierras japonesas, con mucha humildad», relata el artista sobre la intención de las obras que ambos presentan el espacio Lluc Fluxà.
La galería destaca que «como un haiku en sí mismo, cada dibujo y pintura nos conectan con la captura de la imagen de la vivencia del presente, evocando momentos y sensaciones a través de formas, colores y texturas».
En esas obras, se puede contemplar «una lluvia de hojas doradas, ocres, naranjas... para recrear nuestra mirada», remarcan desde la Lluc Fluxà.
Además de la exposición, que estará abierta hasta el próximo 30 de enero, se ha programado como actividad paralela una charla con los dos artistas, el próximo 9 de febrero, a las 19 horas. Ese mismo día se presentará la instalación Mar de’n Bashô, de Nofre Fuster.
