La emoción y los aplausos, en el intermedio y al final de la representación, fueron la nota dominante en el esperado estreno de L’Arxiduc, producción de la Orquestra Simfònica de Balears. La ópera documental, con música de Antoni Parera Fons y libreto de Carme Riera, muy bien documentado, puso en liza a 120 artistas, con el tenor David Alegret y el barítono José Antonio López en la piel del archiduque joven y viejo, respectivamente. Brillante estuvo María José Montiel, encarnando a la campesina Catalina Homar, y también el barítono Pau Camero, como Wladislaw Vyborny.
Los aplausos fueron de la mano del entusiasmo, el que derrocharon no solo los cantantes, también los músicos de la Simfònica, que se enfrentaron a la nueva partitura de Parera Fons bajo la dirección de un entregado Pablo Mielgo.
Al estreno asistieron más de 700 personas, que vistieron de gala un abarrotado Teatre Principal, adonde regresará este Arxiduc el próximo domingo, a partir de las 20 horas.
Entre las butacas del Principal se pudo ver a diferentes personalidades del mundo cultural y de otros ámbitos como la presidenta del Govern, Francina Armengol; la actriz y directora general de Cultura, Catalina Solivellas; el profesor Damià Pons; o los músicos Joan Company y Miquel Estelrich, entre muchos otros.
