La intensa jornada de Javier Cercas en Mallorca para presentar El castillo de Barbazul finalizó ayer en el teatro municipal Mar i Terra con una charla con el periodista de Diario de Mallorca Matías Vallés y el artista Biel March, convertidos en personajes de la novela.
Ante un público deseoso de conocer más sobre su última obra, Cercas habló de literatura y de sus «verdades universales» y de corrupción, cuestión que había introducido Vallés al inicio de esta charla. En respuesta al periodista, el escritor convino que «es impepinable» que «los ricos operan con otras reglas» y que «el mejor instrumento que hemos inventado contra eso se llama democracia».
Cercas también habló de Mallorca: «Una isla en la que conviven, además, como dos sociedades, una muy cosmopolita, hedonista, rica y, al mismo tiempo, una sociedad muy arraigada, de una isla que es un lugar especial, que ha querido preservar sus tradiciones, su modo de vida, en cierto sentido conservadora, esos dos mundos crean un microclima muy particular», comentó. También aseguró que estaba en deuda con Biel March «por todo lo que ha hecho por esta novela» y bromeó sobre lo que hubiera dicho Vallés de su libro si no se hubiera documentado como lo había hecho.
«Dudo mucho que a partir de ahora se pueda ser mallorquín o devoto de Formentor sin haber leído El castillo de Barbazul», afirmó Vallés al respecto.
