Las joyas hablan, dice Nieves Herrero, que ha escrito una novela sobre las conocidas como "joyas de pasar" de la reina Victoria Eugenia que doña Letizia ha usado en alguna ocasión para reivindicar la fuerza de la institución monárquica, asegura la periodista y escritora en una entrevista con Efe.

'El joyero de la reina' es el título de la nueva novela de Nieves Herrero, en la que cuenta la vida de Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII y bisabuela del rey Felipe VI, y la historia de las conocidas como "joyas de pasar" que la monarca decidió que pasaran de reina en reina, un conjunto de alhajas regalo de Alfonso XIII que hoy están en manos de doña Letizia.

La novela, de Ediciones B, comienza cuando en 2014 Letizia recibe este legado de manos de la reina Sofía y le pide a sus más cercanos colaboradores que le cuenten la historia de las mismas. Una historia que se retrotrae al 31 de mayo de 1906 cuando Victoria Eugenia de Battemberg se prepara para contraer matrimonio con Alfonso XIII y recibe de manos del joyero Ramiro García-Ansorena la tiara de las Flores de Lis, regalo del rey.

Además de esta tiara, el conjunto de las "joyas de pasar" contiene un broche del que cuelga la perla que la reina Victoria Eugenia aseguraba que era la Peregrina, sin serlo; un broche de perlas grises, dos pulseras iguales de brillantes, un collar de chatones, dos pendientes de brillantes, un collar con 37 perlas y cuatro hilos de perlas grandes.

Y según explica Nieves Herrero, una de esas joyas, la denominada Peregrina, quizá la más emblemática de todas ellas, fue elegida por la reina Letizia para llevarla el Día de la Hispanidad de 2017, pocos días después del discurso que pronunció el Rey por el referéndum en Cataluña.

La Reina con la joya peregrina en 2017. EFE

"Las joyas hablan y la reina Letizia estaba así mandando un mensaje reivindicando la fuerza de la institución monárquica y la fuerza de la unidad de España", a través, asegura, de "un guiño a las joyas de la reina Victoria Eugenia, que peleó muchísimo por el regreso de la monarquía a España", considera Nieves Herrero.

Otra de las joyas con las que la reina Letizia suele remarcar la importancia del acto son "las gemelas" de Victoria Eugenia, dos pulseras idénticas de brillantes, agrega: "Cuando saca las joyas de pasar, está diciendo, aquí está la institución", asegura la escritora.

Símbolos de poder

No obstante, destaca la discreción en el uso de estas joyas que hace la monarca española frente a la ostentación de otras casas reales: "No son tiempos para llevar el joyero encima", dice Nieves Herrero, que reivindica además el carácter de obras de arte que tienen estos objetos.

Unas joyas a las que ella no era nada aficionada aunque reconoce su valor histórico. Pero, recuerda, fue hace ocho años cuando cayó en sus manos una fotografía de la reina Victoria Eugenia y le pareció "tan alucinante" que llevara "tantas joyas puestas" que decidió escribir sobre ello y comenzó a investigar con los joyeros Ansorena.

Porque Ramiro García-Ansorena no fue solo el joyero la reina Victoria Eugenia, sino también un confidente con el que descubrió la historia y el origen de las joyas reales. Y a través de él, la novela describe las características de las perlas, los zafiros, las esmeraldas e incluso la curiosa historia de la falsa ‘Peregrina’.

Una historia de las joyas como símbolos de poder, amuletos o regalos de amor envenenados ya que, indica la autora, Victoria Eugenia fue "la reina más desdichada" y las joyas fueron su fuerza: "Ninguna reina de España las veneró como ella", dice.

Pero algunas eran "espinas", como el collar de "chatones", diamantes que le regalaba el rey por sus cumpleaños o nacimiento de un hijo, pero también por infidelidades: "Cada chatón que recibía era una espina porque sabía lo que había detrás", indica.

Herrero retomó el proyecto de escribir este libro durante la pandemia, de tal forma que, asegura, fue su liberación: "Victoria Eugenia me fue haciendo más llevadero todo y le debo que hoy la pandemia no me haya dejado un TOC", cuenta la periodista y escritora.

Porque, como asegura uno de los personajes de la novela, recuerda su autora, "las joyas te hacen olvidar el lado oscuro de la vida".-