El rodaje de The Crown en la isla ha dejado cerca de un millón de euros en total. La grabación en Mallorca de varias escenas de la quinta temporada de la exitosa serie de Netflix sobre la Familia Real británica ha supuesto, entre otras cosas, la contratación de unos 350 figurantes locales y una inversión de casi 250.000 euros para alojar a los intérpretes y el resto del equipo procedente del Reino Unido. La producción ha contado con 160 profesionales entre los provenientes de Left Bank Pictures y los contratados por Palma Pictures, la empresa que se ha encargado de prestar toda la asistencia técnica previa, como buscar las localizaciones, por ejemplo, y durante los cinco días de rodaje, tal como desglosó ayer el directivo de la empresa Germán Traver.
La inversión realizada por la productora para grabar diversos momentos de las vacaciones de Lady Di, Carlos de Inglaterra y sus hijos, Enrique y Guillermo, durante agosto de 1991 también incluye el alquiler del lujoso yate Christina O, que perteneció al magnate Aristóteles Onassis. Tal como se publicita en su página web, un chárter de una semana asciende a 630.000 euros, pero ese dinero no recae en Mallorca. Sí lo hace el alquiler de los amarres y el barco estuvo atracado tanto en el Club de Mar de Palma como en Marina Tramontana, del puerto de Sóller. Un desembolso medio para un barco de cien metros de eslora puede alcanzar los 3.000 euros al día, según informaron fuentes del sector.
Durante los cinco días de rodaje se contrató 'catering', alquiler de vehículos, reserva de espacios para rodar, etc.
También se contrató servicio de catering para los trabajadores durante los cinco días de rodaje, el arrendamiento de decenas de furgonetas para los desplazamientos del equipo y la reserva de espacios públicos y privados, como el pantalán del Club de Mar, la playa del Torrent de Pareis, la de Sant Elm y la plataforma y varias habitaciones del hotel ubicado en primera línea de esta localidad costera, donde Lady Di y Carlos fueron recibidos con vítores.
