Loquillo y el grupo tributo a Queen Dios Salve a la Reina son las últimas incorporaciones del festival Cultura es Vida Mallorca. El incombustible rockero llegará a Palma, al recinto de Son Fusteret, el 26 de agosto con su gira el Último Clásico, mientras que la banda de Pablo Padín, el cantante que se mete en la piel del inmortal Freddie Mercury, aterrizará el 27 de septiembre.

Grabado de nuevo en los estudios Music Lan de Figueres, y con la producción de Josu García y el inestimable trabajo de Jordi Solé a los controles, Loquillo y su banda han grabado un disco de rock mayúsculo de canciones que cuentan con la firma de colaboradores clásicos como Gabriel Sopeña o Igor Paskual, algunos que lo han hecho con anterioridad como en el caso de Leiva y otros que lo hacen por vez primera como Marc Ros de Sidonie, o Santi Balmes de Love Of Lesbian. Luis Alberto de Cuenca y Carlos Zanón lo hacen aportando textos. Sin duda, todo un plantel de lujo al servicio de una causa, la entrega de El último clásico. 

Por su parte, Dios salve a la Reina se ha convertido en un fenómeno excepcional, reviviendo la magia de Queen en América, Europa, y el resto del mundo; con conciertos completamente agotados en importantes ciudades como Buenos Aires, Sao Paulo, Mexico DF, Madrid, Barcelona, Liverpool, entre otras. En su haber cuenta con presentaciones realizadas para grandes multitudes en el Mathew Street Festival de Liverpool (UK) para más de 35 mil personas o las Fiestas del Pilar en Zaragoza (España) con más de 250 mil espectadores.

Pablo Padín, cantante de Dios salve a la Reina Rui M Leal

Desde la organización del festival se anuncia, además, un cambio de fecha, el del concierto de Xoel López, que pasa del 19 de junio al 19 de agosto

La organización, ha informado en un comunicado, está trabajando “para conseguir la mejor experiencia para los asistentes y para el público al Festival, estamos intentando obtener respuestas por parte del Govern de les Illes Balears, aunque después de la publicación del BOE hay más esperanza en que estará previsto la posibilidad de realizar eventos multitudinarios hacia una nueva normalidad, sectorizados por 1.000 personas con accesos independientes, con aforo máximos y con otra seria de normas a cumplir según el nivel de Covid del momento. A día de hoy seguimos trabajando con un modelo de público sentado, con sillas y mesas numeradas, un servicio de restauración en mesa para que el público tenga una experiencia de lo más cómoda y segura que se pueda tener”.