Líder del grupo El Petit de Cal Eril. Joan Pons actúa este domingo en el Auditori de Manacor, a las 19.00 horas, con nuevas canciones, como ‘Cauen les estrelles’, adelanto de su octavo disco. Nueve temas salidos de una corta visita al estudio: «Nos gusta grabar muy rápido, entendemos las canciones como fotografías»
¿Qué nos traen a Manacor?
Estamos de estreno en todos los sentidos, con un disco nuevo y se podría decir que en el inicio de una gira. Cuando sacamos un disco nos lo planteamos como empezar de cero, y eso siempre resulta emocionante. Seguimos haciendo lo mismo, con cambios, sí, pero lo mismo. Lo nuestro es un autoengaño para el subconsciente.
¿La covid ha puesto a todos en la línea de salida?
Aún no he entendido nada de la pandemia. Necesitaré unos años para saber qué ha pasado. La pandemia nos ha puesto limitaciones pero no nos ha influido creativamente ni ha alterado el disco ni la gira.
Quince años de carrera, ocho discos. ¿Aun le queda camino por recorrer a El Petit de Cal Eril?
Todo ha ido paso a paso pero cuando miras atrás dices: «Uep, qué ha pasado aquí». La sensación que tenemos siempre es la misma: nos queda mucho por aprender. Cuando acabamos un disco nos decimos, «qué guay», pero aun tenemos que trabajar mucho para hacer los discos como nos gustaría hacerlos. Eso es excitante y positivo, porque si tienes la sensación de que ya lo has hecho todo, dirías: «Bueno, y ahora qué».
¿Qué les ha exigido su nuevo disco, que verá la luz en otoño?
Hemos hecho un esfuerzo para hacer canciones muchas más cortas y mucho más intensas, lo indispensable que pide la canción, y no más. Nos gusta grabar muy rápido, entendemos las canciones como fotografías. El disco ya tiene título, que aun no puedo decir, y ya está en la fábrica. Incluye nueve temas.
¿En qué formato lo presentarán?
El formato físico es casi una broma en la industria. El disco lo publicaremos en vinilo y... ¿qué hacemos con el cedé? El cedé está en declive. Quizá hagamos alguna tirada súper corta. Casetes hacemos a veces, y luego están los formatos digitales, tan horribles pero necesarios. Los ingresos que recibimos los músicos de ahí son ridículos, lo que pagan es una vergüenza, como también lo es lo rico que se están haciendo las compañías telefónicas.
"Joan Miquel Oliver es un referente, como lo fue Antònia Font. Me encantaría verles en Barcelona"
¿Qué relación mantiene su grupo con la industria?
Nos consideramos muy underground en este sentido. Tenemos una organización muy propia que nos ha hecho ser bastante fuertes y resistentes. Todos los que estamos en el proyecto estamos orgullosos de eso. Vivimos de lo que generamos, al margen de ayudas y subvenciones.
La industria y el mundo se nos caen, como Cauen les estrelles. ¿Qué nos quieren contar en el videoclip?
Con esa canción nos imaginamos un nuevo mundo en el que las cosas no funcionan como estamos acostumbrados. Para mí es una humanidad con un futuro increíble en el que las organizaciones funcionarán diferentes. No hay diferencias entre hombres, mujeres y niños. Un mundo soñado.
¿Asistirá al concierto de Antònia Font en Barcelona?
Me encantaría. Joan Miquel Oliver es un referente, un personaje muy inspirador, y también lo fue Antònia Font. Son especiales y auténticos. Han estado en el mainstream pero siempre han jugado a su onda, no han intentado hacer nada para vender, al contrario, siempre han sido un grupo muy experimental en este sentido.
