Hubiese quedado como una mera anécdota para los balearicos con mayor solera, de no ser por la tarea de investigadores como Manel García, doctor en Historia. El autor de Els origens de l’Atlètic Balears (1920-1942). Dels inicis a la fusió y L’Atlètic Balears: Els primers anys d’una entitat centenària, ha rescatado de su archivo de investigación los recortes de prensa del único enfrentamiento entre el Atlético Baleares contra el Real Madrid, cumpliéndose sesenta años de dicha efeméride.
Era el 24 de enero de 1962 y el equipo blanquiazul, que entonces militaba en Segunda División, al coincidir que en siete días debía disputar dos encuentros ligueros en Gijón y Valladolid; fue invitado por el Real Madrid a disputar un encuentro de entrenamiento frente al equipo de reservas. En la época era una práctica habitual y Miguel Muñoz, entonces entrenador blanco, buscaba ‘sparrings’ de la categoría de plata para que los futbolistas de su plantilla con menos minutos no perdiesen el ritmo de partidos.
Alfonso Aparicio, que un mes antes había tomado el relevo en el banquillo del Estadi Balear a Jaume Brondo y este a Juan Navarro debido a los malos resultados, presentó un once en el Santiago Bernabéu formado por Martínez en la portería; Cladera, Herrera, Navarro en defensa; los mediocentros Villar y Pachi; con Cintas, Ricardo, Gilabert, Mosquera y Fuertes en ataque. En el segundo tiempo entraron Munar, Massanet y Villarrubia.
Su homólogo madridista Muñoz alineó en portería a Betancourt; los zagueros Isidro, Collar y Felo; Vidal y Zárraga en el centro del campo; Gento III, Ruiz, Pepillo, Marsal y Canario en la línea ofensiva. Antonio Gento, indicado en la alineación como Gento III, es el hermano de la recientemente fallecida leyenda blanca, Paco Gento, quien entonces era titular indiscutible. También José García Castro, ‘Pepillo’, es recordado al llegar cedido al Mallorca la temporada siguiente y marcar once dianas en Primera, dos de ellas en la goleada a su exequipo en el Lluís Sitjar (5-2).
Precisamente el delantero melillense ya daba muestras de su olfato goleador al anotar, tras haber llegado dos a uno al descanso, cuatro de los ocho tantos que el Real Madrid le marcó al Baleares (8-1). Pepillo incluso falló un penalti en un encuentro donde se señalaron tres más. Dos de ellos anotados por su compañero Vidal, además del gol del honor balearico que había sido obra de Luis Fuertes tras pararlo el meta.
Regreso: Esteban Muñoz dirigirá el cadete B
El excapitán balearico vuelve al club, ahora como técnico, tras anunciar días atrás su retirada como futbolista. El protagonista de dos ascensos a Segunda B y el título de la Copa RFEF, entrenará el equipo base cadete B.
