Un derbi no suele responder a ninguna lógica. Es un partido diferente que se debe estudiar independientemente de las circunstancias que rodean a los dos equipos que lo disputan. Si un equipo todavía no ha conseguido una sola victoria en todo el curso, es muy probable que en el derbi la consiga; del mismo modo, si el rival vive una dinámica ascendente y es un claro aspirante a toda en su liga, también es probable que esa racha se desvanezca. Eso es lo que ha pasado este mediodía en el Estadi Balear, donde el Poblense ha sumado su primera victoria de la temporada ante un Atlético Baleares (2-3) que deja de ser, por méritos propios, un serio aspirante a algo.

Aterrizaba el derbi mallorquín 31 años después de la última ocasión en la que ambos equipos se vieron las caras en la división de bronce del fútbol español, con un Estadi Balear a media bandera, debido a las restricciones provocadas por la pandemia. Los locales, en busca de una victoria que les asentara en la parte alta de la tabla; los visitantes, ansiosos por sumar su primer triunfo del curso.

Afrontó el encuentro Óscar Troya con las importantísimas bajas de Lucas Giraldoni, Mateu Ferrer, Calonge y Pau Cendrós, además de dejar a Dani Benítez en la banqueta por precaución. Jordi Roger llegaba con una plantilla mermada por las ausencias de Alberto Gil y el británico Armando Shashoua.

No tardó el Poblense en dar el primer aviso. A los diez minutos Pep Vidal dirigió un buen centro para Aitor Pons, quien remató de cabeza, un poco flojo, a la izquierda de la portería defendida por Juan Carlos. La respuesta del Baleares tampoco se hizo esperar. Tras un gran pase de Coro al espacio, se la jugó Miranda en un uno contra uno ante el portero Inmanol. Baselga, totalmente solo, le recriminó a su compañero de filas que no le cediera el esférico.

Como todo buen derbi, el partido comenzó a calentarse y el colegiado avivó el encuentro mostrándose excesivamente permisivo en algunos lances del mismo. La primera polémica llegó precisamente tras una decisión arbitral, al pitar este unas dudosas manos en el interior del área a favor del Baleares. No erró Corominas desde los once metros en el minuto 25 del encuentro (1-0).

Los jugadores del Baleares celebran el primer tanto de Corominas. ATB

El Poblense no se vino abajo, pero las numerosas pérdidas del balón en la zona de creación del equipo de Óscar Troya no ayudaban en la búsqueda de la primera victoria blaugrana. Al paso por la media hora de juego, Jaime bombeó de manera magistral la pelota y Juan Carlos, a quien le faltó claramente contundencia en su salida, dejó la pelota muerta en el área pequeña, para que Alberto solo tuviera que empujarla y poner las tablas (1-1).

Todos los planes del Atlético Baleares, orquestados por Jordi Roger durante el descanso, se fueron al traste a los dos minutos del segundo periodo. El colegiado volvió a tomar protagonismo señalando pena máxima por un empujón a Alberto Fenández en el área, que ni el propio jugador del Poblense solicitó. Jaime Hernández giró el marcador anotando desde los once metros (1-2). El batacazo se hizo notar en las gradas del Estadi, más si cabe cuando, solo cuatro minutos después, Mateo Garcías anotaba el tercero tras un buen centro de Hernández en la frontal del área pequeña (1-3).

Lo único que tenían que hacer los de Troya era administrar la ventaja, un reto no siempre fácil cuando los nervios se hacen patentes con 40 minutos de partido todavía en juego. Enfrente, el Baleares, muy tocado tras los dos tantos encajados, se armó de valor para maquillar el resultado. Corominas, otra vez desde los once metros, recortó distancias en el 64 (2-3), tras unas claras manos de los visitantes. Pero pese a contar con tiempo suficiente para revertir la situación, los blanquiazules ya fueron incapaces de evitar la derrota.

Habría ayudado, claro está que el árbitro hubiera señalado penalti en unas claras manos de Femenías, en el interior del área, a falta de solo cuatro minutos para el final del encuentro, pero estas no fueron vistas por el colegiado, que sí expulsó a Pedro Orfila por doble amarilla en los últimos minutos del derbi.

Ficha técnica:

Atlético Baleares: Juan Carlos, Miguel Acosta (David Haro, min. 51), Pedro Orfila, Christian Pérez, Peris, Baselga (Barrera, min. 51), Alfonso, Luca Ferrone (Olaourtua, min. 86), Fito Miranda (Dani Pichín, min. 62), Vinicius y Corominas.

Poblense: Inmanol, Mateo, Damià, Víctor, Jaime, Aitor Pons, Javi Moreno, Pep Vidal, Alberto (Gianquinto, min. 73), Raúl (Dani Benítez, min. 84) y Álvaro (Femenías, min. 56).

Goles: 1-0: Corominas, desde el punto de penalti (min. 25). 1-1: Alberto Fernández (min. 31). 1-2: Jaime Hernández, desde el punto de penalti (min. 47). 1-3: Mateo Garcias (min. 51). 2-3: Coromininas, desde los once metros (min. 64)

Árbitro: Manuel Ángel Pérez (Colegio madrileño).

Tarjetas amarillas: Mateo (min. 29), Juan Carlos (min. 31), Jaime Moreno (min. 63), Jaime Hernández (min. 85), Cristian Pérez (min. 87) y Pedro (min. 87). También amonestó a Óscar Troya por protestar (min. 26).

Tarjetas rojas: Pedro Orfila (doble amarilla min. 87 y min. 88).